Durante el feriado por el ‘Día de Los Difuntos e Independencia de Cuenca’, la Policía Nacional del Ecuador desplegó un total de 52.786 uniformados en todo el país para llevar a cabo más de 9.000 operativos de seguridad. Este dispositivo, activado entre el miércoles 30 de octubre y el martes 5 de noviembre de 2024, tuvo como objetivo garantizar la seguridad en puntos clave como cementerios, terminales interprovinciales, aeropuertos, centros turísticos, y otros lugares de alta afluencia de personas.
Las operaciones se concentraron no solo en áreas de gran tránsito, sino también en zonas rurales y en carreteras, con el fin de contrarrestar cualquier intento de criminalidad. En total, se lograron resultados destacados, como la detención de 930 personas, entre ellas varios individuos por delitos relacionados con armas, drogas y contravenciones de tránsito. La Policía también desarticuló dos grupos armados organizados y realizó una incautación significativa de más de 100 armas de fuego, 332 armas blancas y casi 2.140 kilogramos de sustancias sujetas a fiscalización.
El dispositivo de seguridad no solo tuvo un enfoque preventivo en áreas urbanas y rurales, sino también en eventos masivos que convocaron a miles de personas, como conciertos y festivales en ciudades como Esmeraldas, Tungurahua, Manta y Cuenca. En estos eventos, la Policía garantizó la seguridad pública, manteniendo el orden en lugares con alta concentración de público. Además, se realizaron más de 140 operaciones relacionadas con el transporte de valores y medidas de prevención para resguardar la seguridad de los ciudadanos durante el feriado.
Uno de los enfoques clave del operativo fue el control del flujo vehicular en ciudades como Quito, donde se registraron más de 868.000 vehículos de salida y 630.000 de ingreso. Las autoridades llevaron a cabo más de 6.800 inspecciones a vehículos y motocicletas, además de arrestar a 122 personas por conducir bajo los efectos del alcohol y sancionar a otros 60 por contravenciones de tránsito.
En resumen, con esta vasta movilización, la Policía Nacional no solo demostró su capacidad operativa, sino también su compromiso con la seguridad y el bienestar de los ecuatorianos, asegurando un feriado tranquilo y sin mayores incidentes.