Daniel Noboa impulsa una medida para utilizar armas incautadas en la lucha contra el crimen organizado en Ecuador
El presidente Daniel Noboa ha anunciado una medida para combatir de manera efectiva al crimen organizado en Ecuador. A partir de ahora, las armas incautadas en altamar, particularmente en Galápagos, pasarán a ser bienes del Estado y estarán al servicio de las Fuerzas Armadas. Entre el arsenal recuperado se encuentran 122 fusiles, 48 pistolas y una radiobaliza, que serán empleadas por las fuerzas de seguridad en su misión de proteger al país. Noboa subrayó que estas armas, en lugar de oxidarse en almacenes o caer nuevamente en manos del crimen, ahora estarán en manos de quienes están comprometidos con la defensa nacional.
Este plan de acción responde a la urgente necesidad de fortalecer el bloque de seguridad en Ecuador, en un momento en que el crimen organizado ha intentado afianzar su presencia en el territorio nacional. Noboa destacó que, por décadas, las armas capturadas quedaban almacenadas, desaprovechando su valor en la lucha contra la delincuencia. «Hoy, Ecuador y su bloque de seguridad pueden tener en sus manos lo que por años otros intentaron negarles, quienes durante décadas intentaron fortalecer al bando contrario», expresó el presidente en un discurso contundente, que apunta a recuperar la seguridad y el orden en las zonas más afectadas por el crimen.
El uso de estos bienes incautados marca un precedente en la política de seguridad del país, reforzando el compromiso de Noboa y su administración en la protección de la ciudadanía. Esta decisión también subraya la importancia de aprovechar los recursos del Estado en estrategias de defensa, evitando que las armas incautadas terminen en desuso o en circulación dentro de grupos delictivos.
