Nacional, Política

Crisis de gobernabilidad en el Legislativo: Niels Olsen suspende por segunda vez la instalación de la Asamblea Nacional

La Asamblea Nacional continúa estancada en una crisis institucional sin precedentes. Este 14 de mayo de 2025, por segunda ocasión consecutiva, el presidente del Legislativo, Niels Olsen, suspendió la esperada sesión de instalación, evidenciando las fracturas internas entre las bancadas políticas y la falta de consensos para designar las autoridades administrativas del Parlamento.

La sesión se desarrollaba con la expectativa de que finalmente se superaran los bloqueos iniciales y se lograra designar al secretario y prosecretario de la Asamblea Nacional. Sin embargo, la votación para nombrar a Giovanni Bravo como secretario y a Jorge Enrique López como prosecretario no alcanzó la mayoría necesaria, lo que llevó a Olsen a declarar nuevamente la suspensión del Pleno.

“Mientras no existan las condiciones mínimas para el funcionamiento administrativo de esta Asamblea, no podremos avanzar con la agenda legislativa del país”, expresó Olsen, visiblemente incómodo por la falta de acuerdos entre las fuerzas políticas. La falta de quorum y las disputas por el control de cargos estratégicos, que tradicionalmente han servido para equilibrar el poder interno, han derivado en una situación de ingobernabilidad que compromete la credibilidad del Parlamento frente al país.

¿Qué está en juego?

La designación del secretario y del prosecretario no es un mero trámite. Se trata de cargos clave para el funcionamiento administrativo y técnico del Legislativo. El secretario es responsable de levantar actas, certificar documentos y garantizar la transparencia de los procesos legislativos, mientras que el prosecretario asiste en estas tareas.

Sin estas figuras, la Asamblea no puede continuar con los procesos de tramitación de proyectos de ley, fiscalización ni control político, actividades esenciales para la democracia ecuatoriana.

Bloqueos políticos y cálculos partidistas

Los intentos de imponer candidatos sin lograr consensos entre las distintas bancadas han revelado la fragmentación del mapa político actual. Aunque Niels Olsen fue electo presidente con el respaldo de una mayoría coyuntural, las votaciones del Pleno muestran que ese acuerdo fue endeble y no logró sostenerse para avanzar en las designaciones posteriores.

Las bancadas de Revolución Ciudadana, PSC, Construye, ADN, y otros movimientos provinciales se han enfrascado en negociaciones tras bambalinas, priorizando intereses partidistas por sobre la necesidad de conformar un Parlamento funcional.

“Ecuador no puede esperar. Este Legislativo tiene que estar a la altura de su responsabilidad”, afirmó un asambleísta del bloque independiente, quien pidió mantener el anonimato. “Las familias que nos eligieron quieren respuestas, no espectáculos políticos”.

Un mal precedente para el nuevo periodo legislativo

El nuevo periodo legislativo 2025–2029 inicia en medio de tensiones heredadas del anterior. La falta de acuerdos básicos genera preocupación en sectores sociales, empresariales y académicos que esperan del Parlamento una agenda enfocada en empleo, seguridad, educación y reactivación económica.

Para los analistas políticos, este estancamiento representa un “mal síntoma” del rumbo que podría tomar la Asamblea. “Es alarmante que ni siquiera puedan designar a sus funcionarios administrativos. Esto refleja una fragmentación parlamentaria muy profunda y una ausencia total de liderazgos con capacidad de negociación real”, señaló un politólogo lojano.