En un hecho sin precedentes en la ciudad, un grupo de delincuentes fuertemente armados ingresó violentamente al Hospital General Docente de Ambato durante la madrugada del domingo 9 de marzo, generando momentos de pánico entre pacientes, personal médico y visitantes.
El ataque: una irrupción violenta y organizada
De acuerdo con información preliminar proporcionada por la Policía Nacional y testigos en el lugar, alrededor de las 02:30 de la madrugada, al menos diez individuos encapuchados y equipados con armas de alto calibre irrumpieron en las instalaciones del hospital. Su objetivo, según las primeras indagaciones, habría sido rescatar a un interno bajo custodia policial que se encontraba ingresado en la unidad de emergencias del centro de salud.
Los atacantes lograron reducir al personal de seguridad del hospital y amenazaron a médicos y enfermeros que se encontraban de turno. Durante el asalto, se registraron detonaciones de armas de fuego, lo que provocó el pánico entre los pacientes y sus familiares, muchos de los cuales se refugiaron en habitaciones y pasillos.
Respuesta policial y enfrentamiento armado
Minutos después de iniciado el ataque, unidades de la Policía Nacional y del Grupo de Operaciones Especiales (GOE) acudieron al lugar para repeler a los delincuentes. Se generó un intenso cruce de disparos en los exteriores del hospital, lo que derivó en la huida de los asaltantes.
Según el informe policial, tras la balacera, los delincuentes se dieron a la fuga en varios vehículos todoterreno, dejando atrás un rastro de destrucción y caos. No obstante, se confirmó la captura de al menos tres sospechosos, quienes fueron trasladados a la Unidad de Flagrancia para las investigaciones pertinentes.
Consecuencias del ataque y reacciones de las autoridades
Afortunadamente, no se reportaron víctimas mortales, pero sí varios heridos, entre ellos dos guardias de seguridad del hospital, un paciente y un policía, quienes fueron trasladados a otras casas de salud para recibir atención. Además, las instalaciones sufrieron daños materiales significativos, como puertas forzadas, ventanas destruidas y equipos médicos afectados por los impactos de bala.
El Ministerio de Salud Pública emitió un comunicado rechazando el hecho y garantizando la seguridad de los pacientes y el personal. Por su parte, la Gobernación de Tungurahua anunció que se reforzará la seguridad en hospitales y centros de salud de la región para evitar que hechos similares vuelvan a ocurrir.
La Fiscalía General del Estado ha abierto una investigación para determinar los responsables de este violento ataque y esclarecer si hubo complicidad interna que permitiera el acceso de los criminales al hospital.
Inseguridad en aumento: un reflejo de la crisis nacional
Este ataque ha generado gran conmoción en la población, que ha expresado su preocupación por el creciente nivel de violencia en el país. La situación de inseguridad en Ecuador ha escalado en los últimos meses, con ataques a instituciones públicas, secuestros y enfrentamientos entre bandas delictivas.
La ciudadanía exige una respuesta contundente por parte del Gobierno Nacional y las fuerzas de seguridad para garantizar la paz en el país y evitar que hospitales y otros centros de atención se conviertan en zonas de peligro.
Las autoridades han solicitado a la población colaborar con cualquier información que pueda ayudar en la identificación de los responsables de este ataque. Se espera que en las próximas horas se brinden mayores detalles sobre las investigaciones en curso y las medidas que se tomarán para reforzar la seguridad en Ambato y el resto del país.