El presidente de la República, Daniel Noboa, ha anunciado la construcción de 150 viviendas destinadas a las familias afectadas por el devastador aluvión ocurrido en el cantón Piñas, provincia de El Oro. La tragedia, que dejó decenas de damnificados y daños materiales significativos, ha movilizado al Gobierno Nacional en un esfuerzo por ofrecer una solución habitacional digna y segura para los afectados.
El impacto del desastre y la respuesta gubernamental
El aluvión, ocurrido tras intensas lluvias en la región, provocó deslaves, afectando viviendas, infraestructura vial y dejando a cientos de familias en situación de vulnerabilidad. Ante la magnitud del desastre, el Gobierno ecuatoriano activó de inmediato un plan de emergencia, enviando brigadas de rescate, asistencia médica y apoyo humanitario a la zona.
En una visita oficial a Piñas, el presidente Noboa, acompañado de autoridades locales y nacionales, confirmó la construcción de 150 nuevas casas en terrenos seguros, lejos de las zonas de alto riesgo. Estas viviendas serán edificadas con materiales resistentes y bajo estándares de seguridad que permitan minimizar futuros impactos por desastres naturales.
Características de las nuevas viviendas
Según declaraciones del presidente Noboa, estas viviendas serán entregadas de manera gratuita a las familias damnificadas y contarán con un diseño sostenible, estructuralmente seguro y con acceso a servicios básicos.
El plan de construcción, que estará a cargo del Ministerio de Desarrollo Urbano y Vivienda (MIDUVI), incluirá:
- Casas de 60 m² con espacios adecuados para las familias.
- Infraestructura sismo-resistente para mayor seguridad.
- Acceso a agua potable, alcantarillado y electricidad.
- Ubicación en zonas seguras, fuera de áreas de alto riesgo geológico.
El presidente Noboa destacó la importancia de esta medida no solo como una respuesta inmediata al desastre, sino como parte de un plan más amplio de reubicación y prevención de riesgos en zonas propensas a deslizamientos e inundaciones.
Compromiso del Gobierno y reacciones de la comunidad
El anuncio ha sido recibido con esperanza por la comunidad de Piñas, que ha sufrido grandes pérdidas tras el desastre. Las autoridades locales han agradecido la intervención del Gobierno, destacando la urgencia de brindar soluciones definitivas para los damnificados.
El presidente Noboa enfatizó que su administración continuará trabajando en la reconstrucción de la zona y en la implementación de políticas que fortalezcan la resiliencia ante fenómenos climáticos extremos.
«La seguridad y bienestar de los ecuatorianos es nuestra prioridad. No podemos permitir que estas tragedias se repitan sin estar preparados. Vamos a construir no solo viviendas, sino un futuro seguro para Piñas y su gente», expresó el mandatario.
Se espera que la construcción de las viviendas inicie en las próximas semanas, con la meta de que las primeras familias puedan recibir sus casas en el menor tiempo posible.
