Los Sindicatos de Trabajadores y las Organizaciones Indígenas han anunciado una serie de protestas contra el gobierno del presidente Daniel Noboa, en respuesta a la crisis energética, la inseguridad, el desempleo y la reciente suspensión de la vicepresidenta Verónica Abad.
Estas manifestaciones se llevarán a cabo en dos frentes principales: el Frente Unitario de Trabajadores (FUT) y la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (CONAIE). Ambos grupos planean movilizarse en fechas y con demandas específicas.
El FUT ha organizado dos eventos clave:
- Contra Cumbre Iberoamericana (14 y 15 de noviembre): En paralelo a la Cumbre Iberoamericana de Presidentes, que se celebrará en Cuenca, los trabajadores protestarán en rechazo a las políticas del gobierno actual.
- Gran marcha nacional (21 de noviembre): Convocada para exigir los derechos de los trabajadores, en medio de la creciente preocupación por el desempleo y las condiciones laborales en el país.
Por su parte, la CONAIE ha llamado a sus bases a una movilización el 13 de noviembre, en rechazo a lo que califican como la «continuación de la destrucción» por parte del gobierno.
Estas protestas representan una creciente tensión social que refleja el descontento con la actual gestión en medio de una crisis energética y un clima de inseguridad que afecta a gran parte del país. Los líderes sindicales y de las organizaciones indígenas aseguran que se mantendrán firmes en sus demandas, mientras el gobierno busca alternativas para dialogar con los manifestantes.