El país enfrenta un panorama energético alarmante según un documento expuesto por Javier Medina, Director Ejecutivo del Operador Nacional de Electricidad del Ecuador (CENACE). El funcionario ha alertado sobre una crisis energética que podría ser más compleja que la vivida en abril de 2024, debido a la pérdida de capacidad reguladora en el complejo Paute Integral. Este escenario obligaría a implementar racionamientos no programados e incluso de manera forzada, con el fin de asegurar la operación continua del Sistema Nacional Interconectado (SNI).
La gravedad de la situación radica en la imposibilidad de planificar los cortes de energía, quedando sujetos a decisiones inmediatas y urgentes. La situación llevó a que, desde las 11:00 del 9 de noviembre de 2024, comenzaran racionamientos a nivel nacional, con una reducción del 41% del consumo semanal. Esto implica entre 12 y 14 horas diarias de racionamiento con el propósito de preservar la reserva energética del complejo Paute Integral y reducir el riesgo de un colapso total del sistema eléctrico.
Medidas urgentes para preservar la estabilidad energética
El documento detalla que los racionamientos implementados buscan prevenir un colapso energético a gran escala, el cual tendría severas consecuencias para la población y la economía del país. Las autoridades continúan en reuniones para definir acciones que permitan manejar la situación de manera adecuada y reducir el impacto sobre los ciudadanos. La población ha sido advertida sobre posibles apagones y restricciones, mientras se solicita reducir el consumo energético en la medida de lo posible.