Marco Acuña, presidente del Colegio de Ingenieros Eléctricos de Pichincha, ha señalado que los apagones de hasta 14 horas diarias que afectan a Ecuador son resultado directo de la falta de mantenimiento en el parque térmico del país. Según Acuña, el gobierno no tomó las previsiones necesarias durante la época de estiaje y no contaba con reservas hidrológicas suficientes para afrontar la demanda energética.
Crisis por falta de energía térmica
Acuña explicó que la generación térmica debía estar disponible para cubrir las necesidades del país, lo que habría permitido manejar de manera más eficiente los embalses hidroeléctricos y evitar la crisis energética actual. Sin embargo, debido a la falta de mantenimiento, el sistema eléctrico solo pudo contar con 650 megavatios de energía térmica, una cifra insuficiente para garantizar un mejor manejo del sistema eléctrico.
“La generación térmica hubiera sido clave para enfrentar el estiaje, pero no se realizaron los mantenimientos necesarios. La falta de previsión y de reservas ha agravado la situación”, recalcó Acuña.
El costo de no invertir en mantenimiento
Además, Acuña subrayó que la prioridad del Gobierno debería ser la realización de mantenimientos urgentes al parque térmico, ya que esto representaría un menor costo en comparación con otras soluciones energéticas a largo plazo, y podría ser una respuesta más inmediata para mitigar los efectos de la crisis actual.
Según Acuña, el mantenimiento de las plantas térmicas no solo aumentaría la disponibilidad de energía, sino que también reduciría la presión sobre las hidroeléctricas, que actualmente están operando al límite de su capacidad.
Un llamado a la acción
Finalmente, Acuña hizo un llamado al Gobierno para que priorice las inversiones en el parque térmico y así reducir la dependencia de las centrales hidroeléctricas, que han sido las más afectadas por la sequía y la falta de reservas. Según su análisis, esta crisis energética podría haberse evitado si las medidas de mantenimiento se hubieran implementado a tiempo.
